Santo Tomás antes de morir expresó que había aprendido más sobre Jesús en una hora santa ante el Santísimo Sacramento, que en todos los libros que había leído. Descubrió más sobre Su Amor estando en Su Presencia Real, que en todo lo que había escrito. Y todo lo que había escrito y dicho era tan insignificante como la paja, en comparación con el valor de un solo encuentro personal con Jesús en el Santísimo Sacramento.
La teología es el estudio de Dios. La oración ante el Santísimo Sacramento nos da el conocimiento de Dios mismo. La primera es el estudio académico del amor. La segunda, es la cálida experiencia del Amor Personificado. Una es un libro acerca de la persona, mientras que la otra es esa persona diciéndonos directamente todo sobre sí misma.
Monseñor Pepe. Cartas a un heramano sacerdote. Adaptado